Fíjate por dónde vas

Probablemente hayas escuchado que solo podemos hacer una tarea a la vez Si bien tenemos muchas cosas en pares como ojos, orificios nasales, oídos, brazos, piernas, es muy extraño que alguna vez ocupemos por separado a cada uno de ellos en acciones distintas. Entonces, ¿Por qué tenemos dos? Porque con dos "sensores" de nuestros sentidos se puede triangular de donde proviene la información. Y con dos "actuadores", se puede tener mejor equilibrio, gracias a formar triángulos. Y aunque no es que vamos cada día paso a paso diciendo: "Ahora estoy triangulando con la vista donde daré mi siguiente paso, el cuál lo haré formando un triángulo con el piso y mis piernas", es lo más o menos que hacemos.

En un triángulo, además de las tres líneas tenemos los tres vértices o puntos de unión de las líneas. Para el caso se los "sensores" los vértices están en nuestro cuerpo, así que el otro vértice debe estar afuera. Y si por definición un vértice es un punto, así que la información que recibimos proviene de un solo punto a la vez. Pero claro, no somos calculadoras de las que hay que presionar el "=" cada vez que queremos un resultado, sino que al igual que un computador moderno, hacemos muchas cosas a la vez. En realidad un computador haciendo varias cosas a la vez es un engaño, porque es muy rápido haciendo cosas, y en un segundo puede mostrar cosas en pantalla, estar calculando algo, recoger el movimiento del mouse y las presiones de teclas del teclado, transmitir información por internet, grabar vídeo y sonido e incluso subir un poquito la temperatura del ambiente. Todo esto, siendo un muy buen adminsitrador de sus tiempos para su componente principal o núcleo. Vamos, que si nuestra agenda sería planificada por los mecanismos o "algoritmos" de un computador, dormir 8 horas diarias no tendría ninguna dificultad. Y ahora tienen varios núcleos, pero comunicarse entre los núcleos también toma tiempo, entonces las agendas de todos deben tener colocado algo de tiempo para comunicarse con los otros. Se necesita que uno de los núcles se encargue de todas las agendas o al menos que entre dos núcleos tengan fijas las reglas para conversar entre ellos. Nuestro cuerpo si hace muchas cosas a la vez, se mueve, piensa en algo, recibe la información por los sentidos, mantiene el ritmo de su respiración y latidos del corazón, controla su temperatura, e incluso se evalua a si mismo para conocer como estamos por dentro. Y todo eso se comunica a la vez entre todas las partes del cuerpo pero casi toda esa información pasa si o si por el cereebro antes de ir a otra parte del cuerpo. Las partes del cuerpo son muchas, pero cerebro solo tenemos uno y necesita prestar atención a lo que la mayoría del cuerpo está haciendo la vez. Así cada "vez" que miramos nos estamos fijando solo en un puntito de lo que hay afuera, pero nuestros ojos se mueven rápido y podemos ver una película en pantalla gigante en el cine. Pero no observamos toda la película, sino que al igual que como queríamos hacer con la oración del paso anterior, lo único que necesitamos es la información útil. De toda la pantalla gigante, la historia de cada personaje de la película, la persona hablando en el asiento de atrás, la música de fondo, el recordar que cuando entraste empezó a llover, la calefacción que está un poco elevada, el olor a palomitas a maíz, vamos en cada instante solo enfocados en un pedacito de la pantalla y un pedacito de la música, y uniendo eso a la historia general de la película. (Por instante me refiero a un corto tiempo de 5 a 10 milisegundos) Y así uniendo cada uno de esos instantes en una historia general es como al llegar a casa responderemos cuándo nos pregunten que tal estuvo la película o la siguiente semana cuando un amigo nos pregunte si le recomendamos ir a verla. Acerca de lo que hablaba la persona de atrás, sobre la lluvia de antes de entrar al cine, del calor que hacía en la sala, del olor a palomitas quizás no lo contemos a nadie y nos olvidemos de esos distractores tan solo al salir del cine. Y es que fuimos al cine a ver la película. Y es que seleccionamos o escogemos en que nos queremos enfocar justo ahora y toda la información extra, que sin dejar de ser útil para el pasado o futuro, deja de ser importante para el presente. Así la atención es una forma de "agendar" las acciones junto con otro tanto de fijar hacia dónde apuntar nuestros sentidos. Y al agendar no importa solo el tener el tiempo disponible, sino también cuál es la acción planificada o las metas, y las herramientas o recursos disponibles para realizarla. Entonces, ahora que queremos contar las estrellas todo el texto de esta parte no es importante ahora, pero no deja de ser útil. Antes de regresar la atención a las estrellas, por favor cuenta las veces que se pasan la pelota entre los integrantes del equipo con camiseta blanca en el siguiente video:

¿Viste al jugador disfrazado de gorila mientras contabas?